Cardelino, nuestra residencia para la tercera edad, surgió con la premisa de formar una comunidad cercana de amigos, donde todos pudieran sentirse cómodos y en libertad. En respuesta a los desafíos que enfrentamos al crecer, con los hijos tomando caminos propios y la familia sumergida en sus propias ocupaciones, la soledad y las limitaciones asociadas al envejecimiento se convierten en una realidad para las personas de la tercera edad.

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La inspiración inicial se originó en la mente de la madre de Rodolfo, quien concibió la idea de crear un espacio donde ella y sus amigos pudieran envejecer experimentando comodidad y plenitud. Aunque lamentablemente no pudo ver realizado su sueño en vida, Rodolfo, su hermana Sofía y su padre retomaron esa visión para establecer Cardelino.